martes, 25 de octubre de 2011

XXX Certamen Pequeño Formato



      La Asociación Española de Pintores y Escultores ha convocado el 30º Certamen Pequeño Formato.Dos de mis obras han sido seleccionadas y estarán en la exposición que se celebrará en el Centro Cultural Nicolás Salmerón de Madrid,del 2 al 15 de noviembre de 2011.Os seguiré informando.

"Penélope"
(Esperando a Ulises)
Acrílico sobre lienzo
65x54


"Susana"
Acrílico sobre lienzo
65x54
                    .

lunes, 10 de octubre de 2011

Penélope

      En una canción de Serrat "Penélope", se puede escuchar:
"Dicen en el pueblo
que un caminante paró
su reloj
una tarde de primavera.
Adiós amor mío
no me llores, volveré
antes que
de los sauces caigan las hojas.
Piensa en mí
volveré por tí...
Pobre infeliz
se paró tu reloj infantil
una tarde plomiza de abril
cuando se fue tu amante.
Se marchitó
en tu huerto hasta la última flor.
No hay un sauce en la calle Mayor
para Penélope".

   Y aquí está mi Penélope.


"Esperando a Ulises"
Acrílico sobre lienzo.65x54

domingo, 2 de octubre de 2011

Libros y lápices

  "La anciana miró la casa. La nieve derretida había ennegrecido el delicado amarillo de la piedra; bajo las hojas de acanto,el estuco se desconchaba y dejaba al descubierto manchas blancuzcas, como marcas de bala."
  "La gran mansión, con sus enormes ventanales, por los que el aire y la luz penetraban a raudales, sus terrazas, sus salones, sus galerías, donde las noches de fiesta se acomodaban holgadamente cincuenta músicos..."
   "Por otra parte, no parecía oírlos. Se pasaba horas inmóvil, en silencio, con la mirada perdida y las manos cruzadas sobre las rodillas. Estaba encorvada,casi doblada totalmente por la cintura, y tenía la tez blancuzca, mortecina, con venillas azuladas e hinchadas en las comisuras de los ojos."

 Estas citas pertenecen a "Nieve en otoño" de Irène Némirovsky,recién terminada su lectura surgió el dibujo.

"Tatiana Ivánovna"
Grafito sobre papel
30x41

 Comentario sobre Tatiana en el Circulo de Lectura de la Librería de Mujeres

   A vista, vuelo de pájaro, la figura se repliega sobre la tierra, el camino, los recuerdos. Sobre sí. Y pesada, lenta, insistentemente, se muestra en irrevocable caída, abocada a escapar de la rigidez del marco por pura gravedad,por su carne de esfera envolvente. Rodará entonces su destino hacia el sitio del que nunca partío o solo lo hizo para volver. Quedan detrás, de frente las ventanas: caladas, plenas, ciegas metáforas, las dos caras de un mismo sueño. A fin de cuentas, la casa siempre viaja con uno. Y del mismo modo, ya no está.
          Elena Soto